¿Dónde estaba el senador Jorge Enrique Robledo mientras saqueaban los hospitales públicos de Bogotá en la administración anterior?
¿Dijo alguna cosa, hizo alguna denuncia, señaló algún problema o convocó a algún debate?
¿No es sospechoso tanto silencio?
¿No es misteriosa tanta indiferencia?
¿No sugiere este comportamiento una alianza (involuntaria tal vez) entre
la demagogia estatizante y la corrupción?
Con frecuencia (cabe la paradoja) no hay nada
más privatizado que lo público.